Y fue a raíz de una conversación que tuvimos hace meses, por la cual escribí este otro artículo → ¿Te has preguntado qué comen los camarones?. De hecho, fueron dos; posterior a éste publiqué otro referente a lo que comen las jaibas, y ambos artículos fueron colocados en el foro de Temas Generales, en donde cualquiera podía llegar a comentar en contra si así lo consideraba conveniente.
Esta publicación, la que se está escribiendo en este momento, será colocada en el área de Torá, porque creo yo que a partir de la respuesta a la pregunta del título, se llega a la conclusión de que esto es Torá. Es decir, no está ni a discusión ni a debate. Es para obedecer la Instrucción, y punto.
Muy bien. La respuesta a la pregunta es: NO, no se deben de comer los camarones, cualquiera que sea su procedencia. Es decir, puedes comerlos si así lo deseas, si no te sientes inclinado a obedecer la Torá; tan lo puedes hacer, que simplemente en este instante puedes interrumpir la lectura, levantarte, irte a cualquier restaurante de mariscos que abundan en prácticamente todas las poblaciones, sentarte y pedir una orden, y zampártela. Tan tan.
Pero ¿en qué se basaba la pregunta de mi amigo? Si leíste el artículo previo a éste, te darás cuenta que ahí di una descripción del tipo de alimentación que llevan los camarones. Son carroñeros, son camiones recolectores de basura, como lo son prácticamente todos los mariscos. ¿Y por qué no digo TODOS los mariscos? Porque en mi investigación sobre el camarón y las jaibas, me di cuenta que en el internet (al menos en las páginas que yo encontré) hay páginas que tratan del estudio de otros mariscos, en donde no mencionan que se alimentan ni de carroña ni de desperdicios. De hecho por eso detuve ahí la publicación de los artículos aquí en mi foro; y después lo olvidé.
La pregunta de mi amigo me tomó por sorpresa de momento (era una conversación telefónica), pero inmediatamente el Eterno me dio la respuesta. Esto fue lo que le contesté.
Yo digo, y muchos creyentes decimos y aseguramos (con cierta arrogancia, de la cual ya le he pedido perdón al Eterno) conocer la razón del mandamiento de Levítico 11, que califica a todos los mariscos, y a ciertos peces, como animales inmundos. De hecho, veamos qué dice Levítico 11:
- De los animales marinos:
Levítico 11:3-4 escribió: - De los animales terrestres:Levítico 11:9-10 escribió:
- De las avesLevítico 11:13-19 escribió:
- De los insectosLevítico 11:20:23 escribió:
O sea, una vez que comenzamos nosotros a obedecer la Torá, yo me puse a investigar una posible razón para este mandamiento, y yo supuse que habría encontrado la respuesta en la alimentación de las jaibas y los camarones. Pero como digo, no encontré más páginas que hablaran de lo que comen los demás mariscos.
Ahorita que estoy escribiendo esto, me estoy mensajeando por WhatsApp con una hermana de raíces hebreas, quien me dice que en el canal Enlace compartía un médico que los mariscos son los filtros de los mares; por eso huelen tan feo, porque esas cosas blancas que les salen es nada más que pus.
Bueno, eso no lo he podido comprobar. Pero repito: un mandamiento es un mandamiento. Y la misma Palabra nos dice cómo debemos de reaccionar ante los mandamientos:
Mateo 18:3 escribió:
¿Cómo es un niño? Un niño te cree cuando le prometes algo (sobre todo si procuras no mentirle, si sabe que puede confiar en ti). Si tú acostumbras a un niño a que te obedezca con sólo decirle "¡No hagas eso! ¡No toques eso! ¡No camines por ahí!", él te obedecerá instantáneamente, sin primero voltear a preguntar "¿Por qué?" Si tú eres un buen padre (o una buena madre) no esperarás a que tu hijo crezca para poder instruirlo en no meter objetos a los tomacorrientes, ¿verdad? ¿O mientras que no entiende, no se lo impides porque no te entendería tu explicación acerca de la electricidad, etc., y tú sólo juntas tus manos, levantas tus ojos al Cielo, rogando que no le pase nada? Absurdo ¿no crees? No estarás enseñándole obediencia, en realidad.
CONCLUSIÓN
El camarón, sea de criadero o no, sigue siendo un animal inmundo. Y sí, sigue siendo un animal inmundo porque Levítico 11 no ha cambiado. Y para quien afirme que los apóstoles comían de todo (por favor, no muestres tu ignorancia afirmando eso), veamos qué le dijo Pedro al Eterno como unos 10 años DESPUÉS de que el Mesías pasó 40 días caminando con ellos, dándoles mandamiento (Hechos 1), y DESPUÉS de que el Mesías ascendió al Cielo:
Hechos 10:14 escribió:
Ahora, si quieres, puedes investigar qué tan sano es comer camarón de criadero. Por ahí leí que está muy contaminado, y que no es seguro comerlo. Allá tú.
Por mi parte, me desligo de la necesidad de tener que dar explicaciones y encontrarle un por qué a estos mandamientos del Eterno, y me limito a obecderlo. Ya cuando esté ante Su Presencia, si así le parece bien, me dará sus razones. Y si no me las da, ¿qué importancia tendrá entonces?
¡Shalom!